Asegurar la configuración de Windows

Así conseguirás que nadie pueda a través del ratón derecho, cambiarte la estructura del menú Inicio, de la barra de tareas o del Escritorio. Existen otros métodos alternativos para modificar alguno de estos elementos, pero que sepan utilizar dependerá en gran medida de los conocimientos que posean los usuarios que comparten tu equipo. No obstante siempre será una valiosa barrera para prevenir errores accidentales que luego resultan costosos de subsanar y que tanto trabajo adicional suponen. Sea cual sea tu caso, aprende la técnica con estos pasos.

Haz clic en Inicio y luego en Ejecutar y teclea la palabra regedit para que la pulsar Aceptar se abra la ventana de configuración del Registro de Windows.

A partir de aquí, debes ir haciendo doble clic consecutivamente sobre HKEY_CURRENT_USER, Software, Microsoft, Windows, CurrentVersion y por último sobre Policies.

Al desplegarse podrás ver otra denominada Explorer. Haz clic sobre ella para seleccionarla. A continuación, en el panel derecho, podrás ver todos los valores que incluye.

Sitúa el ratón en cualquier zona libre de esta zona derecha y pulsa el ratón derecho obtendrás así un pequeño menú emergente con una única entrada Nuevo, que debes seleccionar. Después escoge el comando ValorDWORD y automáticamente un nuevo valor aparecerá en pantalla preparado para que teclees directamente su nombre.

Escribe exactamente NoChangeStartMenu, haz doble clic sobre él y teclea 1 después pulsa Aceptar para que se haga efectivo el cambio que establece que no se podrán hacer modificaciones, con el ratón derecho en el menú Inicio.

Repite el paso 4 pero esta vez al valor que crees, asígnale el nombre NoTrayContextMenu luego igual que en el paso 5, realiza doble clic sobre él y dale el valor 1 esta nueva entrada te garantiza que no se pueda acceder a la configuración de la barra de tareas con el ratón derecho.

De igual modo crea seguidamente otro valor NoViewContextMenu y asígnale el valor 1 éste se encarga de invalidar el uso del ratón derecho en el Escritorio de Windows en el panel derecho veremos las tres entradas que hemos creado.

Ya puedes cerrar el Editor del Registro. Si ahora pinchas el botón Inicio y pulsas el ratón derecho no encontrarás respuesta, es decir no aparecerá el menú contextual que te permitía hacer cambios y lo mismo ocurrirá con la barra de tareas y el Escritorio. Si quieres deshacer los cambios que has realizado sólo tendrás que borrar las tres claves que habías creado y todo volverá a la normalidad.